Miguel Poveda ya es uno de los principales artistas españoles, trascendiendo más allá de sus orígenes flamencos. Como uno de los más respetables y grandes, ha regresado al flamenco con arteSano, uno de los mejores proyectos en las más recientes décadas de un arte universal. Convertido en superventas y con características de artista pop de primer orden en el branding, realizó el pasado mes de mayo un concierto apoteósico en el Teatro Real para presentarlo en Madrid, ciudad a la que regresa el próximo sábado 14 de julio. Un concierto en el Circo Price, dentro de la programación del festival Veranos de la Villa 2012, que será una nueva oportunidad para descubrir en directo cómo es arteSano. Hablamos con Miguel Poveda sobre arteSano antes de su esperado regreso a la capital española

Ahora, después de todo, arteSano…
Un disco que ha tenido un tratamiento más artesanal que proyectos anteriores. Un disco que quiere reflejar la impronta de lo que son mis recitales de flamenco en directo, con esas pequeñas intersecciones que da lo vivo y espontáneo del directo, que lo hace mucho más artesanal. Una forma sana de tratar el arte, un proyecto que recoge instrumentación puramente artesanal empezando por la guitarra, que hay cantidad de guitarristas en este trabajo, con los instrumentos más artesanales que tenemos en el mundo flamenco. Guitarras percusiones, palmas, y la voz humana. Instrumentación artesanal y humana es la que existe en este trabajo, una forma de mostrar que el arte flamenco está sano, aunque dañado por la pérdida de grandes figuras del flamenco, el cante de Enrique, Chano Lobato, Paquera, Fernanda y Bernarda, Valderrama, la guitarra de Moraíto, Enrique de Melchor, el baile de Manuela Vargas… Mucha gente que al irse deja dañado a este arte aunque por otro lado es gente que se va dejándolo enriquecido con su obra perdurando en el tiempo. Creo que es el disco que más me define y representa hasta ahora.

Además un disco con una perspectiva muy completa, como dice la soleá apolá Con-Vivencia
Sí, de convivencia entre distintas formas cantaoras, distintos lugares que son igual de creativos. Puede ser Triana, Jerez, Lebrija, Málaga, Sevilla… Mostrar esa convivencia, la convivencia también de las distintas formas cantaoras, de las más desgarradoras a las más líricas, convivencia del ser humano independientemente de sus creencias, su sexo, su todo. Moverse en libertad a la hora de contar y cantar, tocar la guitarra, expresarse el artista con libertad, libertad de expresión.

El proyecto se abre con unos tientos de Pastora adelantándose al futuro 83 años después…
Pues sí, son unos tientos de Pastora con otro tratamiento. En el principio, que va a desembocar a lo que fueron los tientos de Pastora, guitarra y voz en tiento tradicional clásico pero que empieza quizás un poco más actual con esas influencias que hemos tenido de lo percusivo. Lo que ha evolucionado la rítmica del flamenco, con esa instrumentación artesanal trabajada por Paquito González.